Una de las cosas que saco en positivo de esta etapa en la vida de todos, son las lecturas y los nuevos descubrimientos de autores/as que estoy haciendo. Y Kerri Maniscalco es una de ellas. Hacía tiempo que no me encontraba nada parecido a lo que Kerri nos trae en 'A la caza de Jack el Destripador'. Una pluma oscura y sutil que fue una maravilla leer. Vamos con la reseña.
Autor: MANISCALCO, KERRI
ISBN: 978-84-92918-28-7
Sello: Puck
Colección:Puck
Esta deliciosa y espeluznante novela de terror tiene una trama inspirada en los asesinatos de Jack el Destripador y un final inesperado que te helará la sangre…
Audrey Rose Wadsworth, de diecisiete años, nació como la hija de un Lord, con toda una vida de riqueza y privilegios por delante. Pero entre las fiestas de té y los vestidos de seda lleva una vida secreta prohibida.
En contra de los deseos de su severo padre y las expectativas de la sociedad, Audrey se escapa frecuentemente al laboratorio de su tío para estudiar la espantosa práctica de la medicina forense. Cuando su trabajo en una serie de cadáveres asesinados salvajemente la arrastra a la investigación de un asesino serial, su búsqueda de respuestas la llevará muy cerca de su propio mundo protegido.
↓Haz clic en la imagen para ir a la reseña↓
Este libro me conquistó con sólo ver su portada y su contraportada: no le pondría inconveniente alguno a la estética de este libro. Tanto la contraportada, con un set de utensilios que nuestra protagonista sabría usar a la perfección, como la portada, me fascinaron. La tipografía, la combinación de colores, incluso la imagen (en este caso, me parece una elección acertada ponerla).Quizá no tiene mucho sentido que tenga en manos lo que parece ser un puñal, ya que ella con lo que más familiarizada está y lo que más la representa son los bisturí. Por dentro, la edición me parece igualmente acertada. Algunos capítulos vienen acompañados de imágenes de la época en blanco y negro, que de alguna manera te ayudan también a ubicarte en el Londres oscuro de Jack el Destripador.
Kerri Maniscalco ha sido uno de los grandes descubrimientos de estos últimos meses. ¡Que autora tan especial! Tiene un estilo oscuro, misterioso, y a veces sangriento (en su justa medida) que consigue llevar de manera magistral y convertir en una trama adictiva. Sí que es cierto que hay partes que puede que a no todo el público le gusten (autopsias, cadáveres abiertos, enfermedades, etc.), pero creo que la autora lleva estas escenas sin insistir demasiado en aspectos desagradables. Pese a que son rasgos que la caracterizan, puede darte tanto una escena donde sientas los ojos del asesino observarte desde la oscuridad, como una escena amena entre los protagonistas. Además, cuida mucho el detalle, la ambientación, e incluso los hechos reales en los que se basa. Su pluma es adictiva no solo por resolver el caso del que trata el libro, sino también por las subtramas que la acompañan y el ritmo con el que se va resolviendo el caso. Sin olvidarnos de recalcar el worldbuilding, que es una auténtica maravilla y si acabáis leyendo el libro me daréis la razón: un vuelo directo a un Londres oscuro y lleno de misterios y peligros en cada esquina.
La trama gira entorno a descubrir quién es Jack el Destripador y cual es su motivación para sembrar el miedo entre los habitantes de Whitechapel, Londres. Para ello nuestra peculiar protagonista, Audrey Rose, junto con su tío y el aprendiz de este, el misterioso Thomas Creswel, trabajarán codo con codo en una búsqueda a contrareloj. A lo largo de la trama, nadie estará libre de sospechas y poco a poco nuestros protagonistas sentirán la mirada del asesino cada vez más cerca.
Pese a que el tema de Jack el Destripador ya está bastante visto, bajo mi punto de vista, la autora consigue darle un toque personal y diferente a lo que hasta el momento había visto. Es innegable que no es un tema innovador, ya que este caso sin resolver ha sido inspiración en cine, literatura e incluso en el mundo del videojuego. ¿Pero por qué, aún así, lo considero innovador? Estamos acostumbrados a la imagen estereotipada del hombre investigador y su ayudante, que tiene una mente privilegiada y siempre consigue resolver el crimen. Sin embargo, en esta historia, la que toma las riendas de la investigación es una protagonista, Audrey, y son su tío y Thomas los que la acompañan (no como ayudantes, sino como iguales). Además, no tiene una mente brillante, sino que se equivoca y gracias a su duro esfuerzo y muchos tropiezos por el camino, consigue resolver quién es el asesino. No es una mujer perfecta, sino que es un personaje real, que sangra y tiene miedos e inseguridades. Esto, para mí, fue darle una vuelta a lo que se podría esperar sobre cómo resolver el caso y me hizo dar un aplauso imaginario a la autora.
Con independencia de considerar la trama innovadora o no, considero que está muy bien planteada y desarrollada. La intriga se mantiene intacta a lo largo de toda la trama: cualquiera podría ser Jack. Esto la convierte en una historia adictiva, que una vez que empiezas a leer ya no puedes dejar de pensar en posibles teorías sobre quién será el asesino.
Como protagonista y una de las cabezas pensantes en este complicado caso tenemos a Audrey Rose. Retomando lo que decía antes, lo primero que me gustó del personaje es que (a diferencia de otras novelas policíacas que he leído) es una mujer la que, acompañada de su ingenio y sus conocimientos, toma las riendas de la investigación. Aunque la acompañen dos hombres, su tío y Thomas Cresswell, ni la frenan ni son sus acompañantes: los tres trabajan codo con codo y se ensucian las manos (a veces de sangre) por igual.
Me gustó también que se salte lo que en la época se esperaba de una mujer de su edad y estatus social y decide cambiar los vestidos y las fiestas por las salas de autopsias y los asesinatos. Y es que Audrey es una mujer diferente a otras de su época por muchísimas cosas. También es diferente en la forma que tiene de ver a otras mujeres, siempre defendiendo que 'las mujeres eran igualmente capaces de tener una profesión o de aprender'.
[...] Estaban repletas de imágenes de cosas que no debían fascinar a una señorita, pero no podía controlar mi curiosidad.
Quizá lo único que no me gustó fue que, a veces, pasaba de ser una mujer a la que no le hacía dar un paso atrás la sangre o la muerte, a una joven que se desmaya en brazos de Thomas o que tienen que llevarla en volandas o agarrada del brazo para no caerse del susto. Esto la convierte, como decíamos antes, en un personaje más real, con sentimientos y debilidades, pero pierde cierta coherencia con el planteamiento del personaje.
Como compañero de investigación tenemos al misterioso Thomas Cresswell . Al principio nos lo presentan como un personaje frío, que gran parte de los conocimientos que tiene acerca de lo que le rodea los tiene por su gran capacidad de observación. Se le describe como una persona que 'era capaz de actuar como una máquina en las más horribles investigaciones'. Y, como no, una de las víctimas de sus deducciones es nuestra protagonista.
Que el señor ayudara a la chica sobre la cual él posase esos ojos para siempre. Yo estaba agradecida de no ser la clase de chica que perdía la cabeza por un rostro apuesto. Tendría que trabajar más arduamente para ganarse mi afecto.
Audrey le llama la atención desde el primer momento, por ese aura de peculiaridad que la envuelve y pronto se convierte en el foco de sus comentarios mordaces y flirteos. Pero poco a poco, su relación va evolucionando pese a que la sospecha sobre él (igual que sobre otros muchos personajes) está permanentemente en el aire. A partir de aquí, Audrey tiene un constante debate entre confiar en él o dejarse llevar por sus intuiciones sobre sus verdaderas intenciones. Sólo leyendo el libro, sabréis cual de las dos gana.
En cuanto al resto de personajes, como buena novela de su género, todos están bajo sospecha. Personajes principales y secundarios tienen la sospecha sobre sus cabezas y esto hace que no consigas fiarte de ninguno de ellos. Sin embargo, todos me parecieron personajes bien hechos, algunos más evidentes que otros, pero que en general aportan contenido a la trama y la ayudan a fluir.
En definitiva, un libro que me ha encantado. Pese a que puede parecer que no es para todos los públicos por tener escenas de asesinatos y lo que estas conllevan (muerte, autopsias, etc), creo que es un libro que va mucho más allá. La pluma de la autora es, para mi gusto, maravillosa: crea una trama adictiva, en la que constantemente te hace dudar quién es o donde estará la persona detrás del Destripador. Pero también crea unos personajes muy bien desarrollados, tanto protagonistas como secundarios (que aportan contenido a la trama principal), y un worldbuilding como hace tiempo que no leía. Para los que os guste la intriga y/o os llame la atención el caso de este asesino londinense, este es vuestro libro.
¡Hola! Tengo muchas ganas de leer este libro, he leído buenos comentarios por todos lados. ¡Gracias por la reseña!
ResponderEliminar¡Besos!
¡Hola! Espero que te animes a leerlo y lo disfrutes. ¡Un saludo!
Eliminar¡Hola! Es un libro al que le tengo mil ganas, ojalá pueda leerlo pronto porque tiene pintada :D ¡Un besito!
ResponderEliminar¡Hola! La pintaza la tiene más que merecida, te lo recomiendo mucho. ¡Un abrazo!
Eliminar¡Holitas! Que increíble forma de reseñar, he disfrutado redescubrir este libro desde tu experiencia lectora. Hace mucho lo tengo en la mira pero aún no lo he leído y con todo lo que cuentas sobre la protagonista (incluso por ese detalle incoherente mencionado) más ganas tengo de leerlo.
ResponderEliminarVenía a comentarte que ya te he añadido al listado de participantes de la iniciativa #YoLeoAutopublicados. Muchas gracias por apuntarte y disculpas por demorar tanto en pasar por aquí.
Te deseo un estupendo fin de semana.
¡Saludos desde Escapando al bosque!
¡Hola Gisela
EliminarMuchas gracias por tu comentario, me alegro de que hayas disfrutado la reseña y espero que pronto le des la oportunidad que se merece a este libro.
Saludos, ¡Feliz semana a ti también!
Buenas, me intrigan mucho estos libros he oído muy buenas cosas de ellos y creo que también me podrían gustar mucho. Me ha gustado mucho lo que has dicho de él y me alegra mucho que lo hayas disfrutado.
ResponderEliminarBesos.
¡Hola!
EliminarMe alegro de que disfrutases el post, espero que te anime a leer el libro.
Un saludo, y felices lecturas.
Se debe tener respeto por toda obra, pues el mero hecho de que un autor concluya una historia es digno de encomio, y más aún lo es cuando se trata de una labor tan extensa y minuciosa como resulta "A la caza de Jack el Destripador". Toda lectura a su vez es subjetiva, y aquello que a un lector le agrada o, incluso, le fascina, deja indiferente a otro, y hasta le rechina. Dicho lo cual, señalaré que me costó mucho leer esta novela y tomarle el gusto a su trama, pese a que aborda un tema muy atrayente. No pude quitarme esa sensación de irrealidad que permea el libro. La técnica de usar a un personaje femenino narrando en primera persona me pareció un error. Un tributo excesivo a un público juvenil en detrimento de lectores de mayor edad. Considero que una historia potencialmente muy interesante se estropeó por esos permanentes toques de novela rosa que se le intercalan. El enamoramiento de la protagonista respecto de Thomas, el apuesto asistente de su tío el forense, me parece un ejemplo de esa orientación fallida del argumento. En fin, mucha fantasía teñida de rosa que, en mi modesto criterio, terminó destruyendo el corazón de la historia. Esa mezcla de géneros (romántico, misterio, gótico, etc) me hizo demasiado densa la lectura dejándome el sabor de que se desperdició una ingeniosa idea, que quedó eclipsado el talento, que por momentos nos muestra la escritora, y también su arduo trabajo de documentación sobre la época victoriana y los crímenes del destripador de Whitechapel.
ResponderEliminarSe debe tener respeto por toda obra, pues el mero hecho de que un autor concluya una historia es digno de encomio, y más aún lo es cuando se trata de una labor tan extensa y minuciosa como resulta "A la caza de Jack el Destripador". Toda lectura a su vez es subjetiva, y aquello que a un lector le agrada o, incluso, le fascina, deja indiferente a otro, y hasta le rechina. Dicho lo cual, señalaré que me costó mucho leer esta novela y tomarle el gusto a su trama, pese a que aborda un tema muy atrayente. No pude quitarme esa sensación de irrealidad que permea el libro. La técnica de usar a un personaje femenino narrando en primera persona me pareció un error. Un tributo excesivo a un público juvenil en detrimento de lectores de mayor edad. Considero que una historia potencialmente muy interesante se estropeó por esos permanentes toques de novela rosa que se le intercalan. El enamoramiento de la protagonista respecto de Thomas, el apuesto asistente de su tío el forense, me parece un ejemplo de esa orientación fallida del argumento. En fin, mucha fantasía teñida de rosa que, en mi modesto criterio, terminó destruyendo el corazón de la historia. Esa mezcla de géneros (romántico, misterio, gótico, etc) me hizo demasiado densa la lectura dejándome el sabor de que se desperdició una ingeniosa idea, que quedó eclipsado el talento, que por momentos nos muestra la escritora, y también su arduo trabajo de documentación sobre la época victoriana y los crímenes del destripador de Whitechapel.
ResponderEliminar