Reseña 148 🧪👩‍🔬 | LA QUÍMICA DEL AMOR, de Ali Hazelwood

 

Para no andarme con muchos rodeos, lo voy a decir claramente desde el principio: vaya decepción de libro. Entiendo que porque te haya gustado un libro de una autora no necesariamente te tienen que gustar los demás. También entiendo que el hype juega malas pasadas, y que aunque no todos los libros cumplen nuestras expectativas como desearíamos, no los convierte en malos libros. 

Pero, aun así, considero que La química del amor ha sido una gran decepción para mí. Después de lo mucho que me gustó La hipótesis del amor, esperaba que Hazelwood me atrapase de igual manera o que por lo menos me sorprendiera con su siguiente historia. Spoiler: nada más lejos de la realidad. 

N.º de páginas:480

Editorial: CONTRALUZ EDITORIAL

Idioma: CASTELLANO

Encuadernación: Tapa blanda

ISBN: 9788418945403

Año de edición: 2022

Traductor: PATRICIA SEBASTIÁN HERNÁNDEZ

Fecha de lanzamiento: 03/11/2022

Una nueva comedia romántica situada en la NASA en la que una científica se ve obligada a trabajar en un proyecto junto a su archienemigo... con resultados explosivos. Bee Königswasser se rige siempre por un código muy sencillo: ¿Qué haría Marie Curie? Si la NASA le ofreciera liderar un proyecto de neuroingeniería, un sueño hecho realidad después de pasarse años malviviendo con las migajas del mundo académico, Marie aceptaría sin dudarlo. Obvio. Pero la madre de la física moderna nunca tuvo que codirigir ningún proyecto con Levi Ward. A ver, Levi no está nada mal: es alto, moreno y tiene una mirada de lo más penetrante. Pero Levi dejó muy claros sus sentimientos por Bee en la universidad: es mejor que dos enemigos trabajen cada uno en su propia galaxia muy muy lejana. De pronto, Bee se encuentra con que su material ha desaparecido, el personal pasa de ella y su maltrecha carrera profesional pende de un hilo. Puede que su lóbulo occipital esté jugándole una mala pasada, pero juraría que Levi empieza a convertirse en su aliado, apoyando sus decisiones, secundando sus ideas... devorándola con esa mirada suya. Y las diferentes posibilidades traen a sus neuronas de cabeza. Sin embargo, cuando llega el momento de jugársela y arriesgar el corazón, solo hay una pregunta que importe: ¿Qué hará Bee Königswasser?

Al igual que cuando vi la portada de su antecesor, a primera vista no consideré que La química del amor tuviera una portada que encajase mucho con mi estilo. Sí que es cierto que encaja con las portadas de las novedades que están sacando últimamente en el género, así que es la decisión acertada en cuanto a ventas. 

Su combinación de colores me parece muy llamativa y, teniendo en cuenta el amor que tiene la protagonista por los colores chillones, me parece hasta graciosa. La tipografía encaja bien y, aunque la ilustración de los personajes no me convence, también me parece acertada. Los embellecedores de capítulo no me gustaron tanto como los de La hipótesis del amor, pero es un detalle que siempre me gusta mencionar por pequeño que sea.

En definitiva, el libro a primera vista me gusta, le daría un aprobado, aunque no creo que se cuele entre mis favoritos del año en lo que a estética se refiere.

Releyendo lo que opiné de su pluma la primera vez y pensando en lo que opino ahora.

Como decía, La hipótesis del amor me gustó tanto que pensaba en la autora como una de las revelaciones de mi año lector y que fácilmente se podría colar entre mis nuevas favoritas. El mayor punto positivo que le vi fue que literalmente pude estar hasta las 4:00 a.m leyendola porque me mantenía completamente enganchada.

Si embargo, con La química del amor me pasó todo lo contrario. Me daba una pereza increíble coger el libro y continuar la historia. Tenía escenas graciosas como la novela anterior, y en ese sentido la pluma de Hazelwood me sigue gustando mucho, pero para de contar. Salvo esas escenas graciosas (a veces un poco repetitivas), no encontré nada que me mantuviera inmersa en la historia. Creo que quizá quiso repetir los mismos patrones para no arriesgarse mucho pero, bajo mi punto de vista, no le salió bien. Entiendo que cada autor tiene sus puntos fuertes o sus rasgos característicos, pero si todo el rato escribes novelas que son copias unas de otras... Es difícil mantener la magia. 

En definitiva: ¿Su pluma me gusta? Sí, porque muchos de los ingredientes que me gustaron en el primer libro de alguna manera seguían estando. El problema es que no supo cómo mantenerme enganchada, y no añadió ingredientes nuevos que me sorprendieran como esperaba. 

Qué pena me da cuando la trama tiene todos los ingredientes para gustarme pero, por un motivo u otro, acaba siendo un chasco. La química del amor tiene varios tropos que me encantan en una comedia romántica (o novela romántica en general): forced proximity, de enemigos a amantes, él se enamora primero... Sin embargo, ninguno funcionó como me hubiera gustado.

La historia gira entorno a Levi y Bee, un ingenieros y una científica que se odian desde que se conocen pero que, por casualidades laborales, tienen que trabajar codo con codo para un proyecto de la NASA. Como era de esperar, pasan tanto tiempo juntos que poco a poco Bee ya no está tan convencida de que Levi la odie y que quizá detrás de toda esa fachada se esconden sentimientos que el Leviatán no es capaz de reconocer. 

Como decía, una de las cosas que más me gustaron de Ali era su sentido del humor. Creaba situaciones absurdas o conversaciones entre los personajes que eran, en el buen sentido de la expresión, surealistas. Sin embargo, en este libro no encontré esa chispa. Sigue teniendo un estilo parecido pero ni las bromas me hacían tanta gracia o me resultaban repetitivas, ni los personajes tenían esas situaciones que te hacían reírte en voz alta mientras lees. 

De la trama, me gustó que Levi y Bee trabajen codo con codo para una empresa tan importante y en la que es tan difícil entrar. Me encanta que en ese sentido trabajasen de igual a igual, incluso a veces es Bee la que le da más de una bofetada intelectual a Levi. Esa parte de la trama me gustó, aunque por momentos me resultaba aburrido leer escenas más técnicas o más centradas en lo que estaban construyendo. Honestamente, me daba igual 😂.

El romance entre ellos, sintiéndolo mucho, tuvo para mí una química (perdón por el juego de palabras con el título del libro) casi nula. Hablemos del por qué↘

Uno de los principales puntos fuertes de Adam en La Hipótesis del amor es que, igual que Levi, nos lo presentan como un hombre que lleva enamorado en secreto durante años de nuestra protagonista. Hasta ahí, ese tropo de "él se enamora primero" ya me tenía enganchada. Pero la gran diferencia, y por lo que considero que no me gustó mucho Levi, es que no sentí en ningún momento esa atracción. A día de hoy sigo sin entender (tampoco se explican mucho) el comportamiento que tuvo durante años con una persona a la que supuestamente quería. La autora quiere argumentar todo con que Levi creció en un entorno poco comunicativo, pero para mí el problema no es tanto que no hable como que cuando habla mete la pata. En el presente, él tampoco sabe darle su sitio a ella, y un ejemplo claro es la comida con ex compañeros a la que van juntos. Ella está bastante incómoda con que "el hecho de que Levi me considerara repugnante sigue siendo la broma más descacharrante del laboratorio", y él se queda sentado sin hacer nada. 

Tiene el aspecto de un Tío Mono al que le hace falta con urgencia un retrato a lo Dorian Gray.

En definitiva, Levi no me gustó especialmente. Físicamente creo que la autora, una vez más, está repitiendo la misma fórmula que le sirvió en el anterior libro, y eso no me acaba de convencer. Levi, lo siento mucho, intenta ser un Adam 2.0 sin mucho éxito.

En cuanto a nuestra protagonista, Bee, por momentos empaticé con ella pero en líneas generales no me cae muy bien (lo siento 😅). ¿Qué me gustó de ella? Primero, lo que comentaba anteriormente de que es una mujer que se gana su puesto, gracias a trabajar duro y su inteligencia, en una empresa tan importante como es la NASA. También empaticé con ella cuando habla de lo frágil que se siente por no haber tenido una familia estable ni un lugar en el que echar raíces. Me pareció interesante plantear todas las secuelas que eso supuso en su vida amorosa, cómo se aferró con uñas y dientes al cretino que era su ex pareja y cómo jugó con ella durante años. 

Y eso es todo lo que me gustó del personaje. Por lo demás, detesté la dependencia que tiene con respecto a lo que opine una persona a la que, según ella, odia. Se suceden varias escenas donde él la hace llorar y son surrealistas. Él no mueve un dedo para intentar calmarla, y ella se siente muy vulnerable por llorar delante suyo. No me parece mal que llore, sino el hecho de que la opinión que tiene de sí misma dependa tanto de lo que opine un hombre. Aunque, insisto, entiendo de dónde vienen esas inseguridades.

"Lo odio con todas mis fuerzas. Por su forma de tratarme. Por tener una sólida carrera de la que yo carezco. Lo odio por llevarme a este estado y quedarse a presenciar los estragos de su obra".

En la misma línea, tampoco me gustaron mucho esas constantes inseguridades y que no pare de pensar que él la odia. Al principio lo puedo entender, pero llega un momento en que él habla claro con ella y ni con esas cambia de actitud. Al ser un enemies to lovers puedo entenderlo, pero todo tiene un límite, ¿no? Por momentos me daba hasta la risa, y no en el buen sentido, cuando leía cosas del estilo: él la ve y aparta la mirada ruborizado. ¿Qué piensa ella? que la ve tan horrible que tiene que dejar de mirarla. Tiene un concepto de sí misma tan distorsionado que ve cosas donde no las hay.  

Sintiéndolo muchísimo, y recogiendo lo que dije en los apartados anteriores, La química del amor me ha decepcionado. Tiene muchos de los ingredientes que me gustaron en su antecesora, La hipótesis del amor, pero creo que quizá esto le jugó una mala pasada a la autora. Su pluma sigue estando ahí, creando situaciones ridículas y divertidas, momentos más spicy y otros emotivos con los sentimientos a flor de piel... Pero en ningún caso consiguió engancharme a la lectura, es más, muchas veces incluso me costaba retomar el libro. 

En definitiva, creo que la siguiente novela que saque Ali será la prueba de fuego sobre si me gusta como autora o si escribió  sólo un libro que me encanta y el resto no son para mí.