Reseña 132 🌙 | CASA DE TIERRA Y SANGRE (CIUDAD MEDIALUNA #1) de Sarah J Maas

Con la autora de este libro, Sarah J. Maas, me pasa algo que curioso, y es que tiene una saga de la que estoy completamente enamorada (ACOTAR) y otra que abandoné en el primer libro por dejarme indiferente (Trono de Cristal). [Tenéis todas las reseñas al final de este post.] Así que cuando salió este libro a la venta en España (septiembre del año pasado) tenía sentimientos encontrados sobre leerlo o no, principalmente por el miedo a otra posible decepción. ¿Conclusión? El que no arriesga no gana, así que aquí estoy meses después dando mi opinión sobre esta nueva saga. ¿Hacia qué lado se inclinará la balanza? 🌙

ISBN: 9788420452883

Fecha de lanzamiento: 17 de Septiembre de 2020

Idioma: Castellano

Formato: Tapa blanda

Editorial: ALFAGUARA INFANTIL Y JUVENIL

Número de páginas: 800

Colección: CIUDAD MEDIALUNA

Bryce Quinlan tenía la vida perfecta, trabajando cada día y saliendo cada noche, hasta que un demonio asesinó a sus amigos y la dejó vacía, herida y sola. Cuando el acusado está entre rejas, pero los crímenes continúan, Bryce hará lo que sea para vengar sus muertes.

Hunt Athalar es un ángel caído, esclavo de los arcángeles a los que una vez intentó destronar. Sus brutales habilidades sirven ahora para un solo propósito: acabar con los enemigos de su dueño. Pero entonces Bryce le ofrece un trato irresistible: si la ayuda a encontrar al demonio asesino, su libertad estará al alcance de su mano.

Mientras Bryce y Hunt investigan en las entrañas de Ciudad Medialuna, descubren dos cosas: un poder oscuro que amenaza todo lo que desean proteger y una atracción feroz que podría liberarlos a ambos.

Una de las cosas que más me gustaron de la saga ACOTAR (junto con la historia, evidentemente) era su estética. Sin embargo, creo que el rumbo que está tomando la autora en este aspecto, en sus últimas novelas, no acaba de ser para mí. Recordemos la polémica de hace meses cuando se desveló la portada de A Court of Silver Flames (ACOTAR #5). Vamos a refrescar la memoria:

Recientemente salió una reedición de la saga y la autora, con esta quinta parte, quiso mantener esta estética y abandonar la que había seguido hasta el momento. ¿Cuál es el problema o lo que se le puede reprochar? Que esta quinta parte sólo va a tener esta edición, de manera que los fans originales de la saga tendrán dos opciones si quieren continuar leyéndola: comprar toda la saga otra vez, o sólo este libro pero no combinará en estética con los demás (ni siquiera en tamaño). 

Pues bien, creo que con esta nueva saga va a seguir con una dinámica muy parecida: una portada llamativa pero más seria y que no refleja lo que te encuentras en el libro. Con esto no quiero decir que no me guste el trabajo del ilustradore; pero, para mi gusto, historia y portada siguen líneas diferentes. ¿A qué viene el cuervo posado en la mano, el candado en el pecho o ese no se qué cubriendo la cara de la mujer de la portada? Son elementos bonitos pero que no tienen coherencia alguna. Lo único que tiene algo de sentido y me gusta es la luna dorada y el juego de colores con el rojo (muy característico de la protagonista) y el blanco. 

En definitiva, le pedí a la estética de Casa de Tierra y Sangre mucho más de lo que me ha dado, y en este sentido ha sido un poco decepcionante. El trabajo de ilustración me parece igual de bueno, pero quizá no el indicado para iniciar esta nueva saga. 

Pero, pese a esta mala decisión, estad tranquilos ya que aún hay esperanza: la pluma de Sarah J. Maas sigue ahí. Pese a la nota que le voy a dar a los dos apartados siguientes (baja), creo que intenta salir de su zona de confort y esto es digno de valorar (¿como reto personal o para ganar más público objetivo?). En el doble de páginas que algunos de sus libros (800), crea una trama bastante compleja y adictiva. PERO también tengo que decir, que aunque llega un punto del libro donde es bastante adictivo, las (no exagero) 250 primeras son básicamente una mezcla entre introducción y relleno. Como se suele decir, nos da una de cal y una de arena.

 

¿Me gustó más su pluma en otros libros? Sí. ¿Considero que, aún con el esfuerzo que supone salir de su zona de confort en lo que a publicaciones exitosas se refiere, lo hace bien? También. ¿Apoyo esta decisión que ha tomado de que su pluma se aleje un poco de lo nos tiene acostumbrades? Eso ya es otro tema. 

En cuanto a los personajes, era donde más expectativas tenía ya que creo que es de lo mejor que sabe hacer: crear personajes que se te quedan grabados. Protagonistas, como Rhysand (era evidente que no podía escribir esta reseña sin mencionarle) o Feyre, pero también secundarios (¿hace falta nombrar a todos?).

Sin embargo, aunque me gustaron (en mayor o menor medida, como pasa siempre), los protagonistas no destacaron sobre los demás personajes como me hubiese gustado. Tuve la sensación de que tenían muchos de los ingredientes para ser buenos personajes y ganarse mi corazoncito lector, pero nunca llegaron a cautivarme. Tenía tantas expectativas en ellos, en muchos aspectos, que cuando acabe de leer el libro mi reacción fue:

Sonrisa completamente irónica por las más de 800 páginas de expectativas vacías que acababa de leer.

El problema que tuve con Bryce y Hunt fue, por un lado, todo el hype que tenía con esta pareja después de los muchos fanarts, críticas y comparaciones que había leído sobre ellos. ¿Me declaro culpable de ponerles a la altura de Feyre y Rhysand antes de tiempo? I say yes. Por otro lado, y el principal problema, es que no sentí que fuesen compatibles, ni que tuviesen química, siquiera que el romance entre ellos sea real. Siendo ambos personajes de armas tomar (en el caso de Hunt literalmente), me esperaba entre ellos unas chismas que sobrepasasen las páginas. Pero conforme leía, sólo veía escenas un poco absurdas (¿alguien me explica la escena de Jelly Jubilee?) y forzadas porque el guion así lo pedía. Considero que sus mejores escenas son aquellas en las que, precisamente, la autora les deja sacar su lado más vulnerable y menos forzado y son simplemente dos personas dañadas que se están conociendo. 

Esos son los personajes de Maas que, para mi gusto, merecieron la pena en otras de sus novelas. Personajes rotos, que han sufrido mucho en el pasado, la mayoría por algo que ni siquiera era culpa suya: abandonados por sus padres (Azriel, Cassian), obligados a casi morir de hambre por gestionar mal la fortuna familiar (Feyre), dominados para defender a su pueblo (Rhys)... 

Eso, en parte, también nos lo encontramos en este libro. Pese a que parezcan tan diferentes y tengan choques constantes, Hunt y Bryce se parecen mucho: ambos tienen fuerza tanto física como en su interior, tienen garra, y sin embargo son repudiados por gran parte de la sociedad, que siempre les mira por encima del hombro. Pero como decía, creo que muchas veces todo este potencial se malgasta en nimiedades como que Bryce se hace la manicura y está obsesionada (lo repite tantas veces que de verdad pierde la gracia) con que Hunt se comporta como un "alfamierdas" cuando en realidad ella se pasa media trama siendo una niña caprichosa.

Entiendo, como ya dije, el camino por el que quería llevar esta nueva novela, pero creo que la forma en la que lo hace no acabó de encajar conmigo. Los personajes repiten muy a menudo argumentos en la línea de "porque las mujeres sois así", "porque los hombres siempre hacéis esto", o haciendo alusiones a la ropa interior de unas y al miembro de otros. Encontrarme con expresiones como  "iría para tirársela o para interrogarla" (esto es una frase literal) me hacía pensar si me había confundido de libro y estaba leyendo una nueva novela de a E. L. James (desde el respeto a su pluma y su estilo). ¿Por qué estas frases y comportamientos tan manidos Sarah J Maas, por qué?

Tampoco acabó de gustarme la ambientación, aunque en parte es normal ya que esta historia es mucho más urbana, no tan fantástica como otras a las que nos tiene acostumbrados. Tampoco me gustó cómo arranca el libro, de lo "colocada" que iba Bryce cuando salía de fiesta y que esto no sólo era común entre sus amigos sino que también lo aplaudían. Por suerte, conforme evoluciona la trama esto trae consigo reflexiones y consecuencias que creo que está bien mostrar.

En definitiva, la trama también tenía potencial y el misterio está bastante bien llevado. Pero si le quitásemos todo lo que ocupan las frases y escenas que no nos aportan nada salvo clichés, los momentos forzados de Hunt y Bryce y relleno que no lleva a ninguna parte, tendríamos una novela de igual o mayor calidad sin necesidad de las 800 páginas que ocupa.

Le doy un 3/5 siendo generosa, ya que considero que ha sido entretenido pero a ratos, no lo suficiente ni tanto como esperaba. Un libro de 800 páginas es importantísimo que busque la manera de atraparte para no convertirse en ese ladrillo sobre tu mesita de noche que te cuesta coger (incluso literalmente, porque creedme, pesa). Sin embargo, para mí, Casa de Tierra y Sangre fue precisamente ese ladrillo. Tenía todo el potencial para gustarme, y sin embargo, me dejó un poco tibia y sin interés en leer la tan esperada segunda parte. Me quedo con la Sarah J Maas que crea universos con mucha más fantasía, no tan extensos pero con una historia que me llega más. Me quedo con la que no mete tantas actitudes innecesarias de "las mujeres sois de esta manera" y "los hombres os comportáis así". Que, aunque entiendo el por qué de impregnar la historia con estas cosas, para mi gusto la acaban ensuciando. Lo mismo pasa con los personajes: tenían mucho potencial por separado, pero crea entre ellos una relación con muchísimas escenas forzadas que llevan a una supuesta tensión sexual donde las chispas brillan por su ausencia. En definitiva, el nuevo rumbo que parece que va a coger la autora no me gusta, y estaré a la espera de si la bajo del podio en el que la tenía con ACOTAR.