miércoles, 11 de julio de 2018

Reseña 60 🍘 | A SILENT VOICE de Yoshitoki Oima

¡Hola a todos y todas!
Imagen relacionada
Fuente



   













En el post de hoy os voy a hablar sobre los siete tomos (de forma conjunta, no haré reseña de cada uno de ellos como haría en el caso de los libros de una saga) de un manga que llamó muchísimo mi atención tras ver su adaptación al cine (sí, qué raro en mi, ya lo sé)(ironía).


“Desearía no habernos conocido nunca. Desearía poder encontrarnos de nuevo.” 
La historia gira en torno a Shôko Nishimiya, una estudiante de primaria que es sorda y que al cambiarse de colegio comienza a sentir el bullying de sus nuevos compañeros. Uno de los principales responsables es Ishida Shôya quien termina por forzar que Nishimiya se cambie de escuela. Años después, Ishida busca la redención de sus malas acciones.
Cuando pienso en esta historia y cómo debería reseñarla, vienen a mi mente palabras como madurar, y capacidad de perdón (muy grande), que destacan por encima de otras palabras que también definirían esta historia, como pueden ser acoso escolar, minusvalía, e incluso diría hipocresía e injusticia, aunque también justicia. Muchas palabras, ¿no? Hablemos de esta historia entonces.

Como decía, una de las palabras que acompañan esta historia es la madurez que van adquiriendo algunos de los personajes. En especial, uno de los personajes protagonistas: Shoya Ishida.

Nos lo presentan como un niño popular, irresponsable y que vive rodeado de amigos que le acompañan cada día en su lucha contra el aburrimiento, con las que llaman pruebas de valor. Vemos además a un niño que, cuando aparece en su vida y en la de sus compañeros una niña nueva con una minusvalía, la rechaza tajántemente. Día a día tiene una actitud totalmente negativa hacia ella, y arrastra al resto de sus compañeros a que tengan la misma actitud, dejándola prácticamente aislada, sola. Por tanto, en esta parte de la historia, es un personaje que despertó en mí sensaciones negativas. Sin embargo, también tengo que decir que, pese a todo el daño que se cuenta que hizo al principio, durante el resto de la historia me pareció un personaje maravilloso y que despertó cierta empatía en mí. Al igual que a la propia protagonista, se ganó mi perdón, por la actitud que tuvo posteriormente. 

Conforme pasan los años, y vemos a un Shoya más adulto, percibimos el cambio que sufrió a causa del sentimiento de culpa que tuvo por lo sucedido en el colegio. Pasa de ser un niño rodeado de amigos, popular, a un niño que prácticamente está solo en el colegio, y logra sentir lo que él mismo hizo sentir a otra persona, Shoko. Desde este momento, trata de mejorar como persona.  

Uno de los mejores momentos de este personaje para mí es la escena en la que este sentimiento de soledad que tuvo durante tanto tiempo se convierte en lágrimas de felicidad por el simple hecho de pasar una tarde con sus amigos en un parque de atracciones. 

En cuanto a Shoko Nishimiya, es maravilloso ver que es la que le ayuda a no rendirse jamás, a ser una persona positiva, a seguir adelante pese a todas las adversidades.


Pese a que recibe por parte de Shoya un acoso de pequeña, sin otro motivo que la constante frase de Odio tanto a esa chica, trata de integrarse día tras día, intenta relacionarse con el resto de sus compañeros  de la mejor manera posible, siempre con una sonrisa en la cara. Sin embargo, sus sentimientos por dentro son totalmente diferentesa lo mejor Shoko nunca se enfadaba porque ceía que todo era culpa suya. Y no solo esto, sino que además ella llega a decir que se odia a sí misma.  Por tanto, la historia de Shoko es una historia de superación y capacidad de perdón


Llegados aquí, creo que es fundamental en esta reseña decir que, bajo mi punto de vista, en ese colegio abunda la hipocresía, tanto en alumnos como en profesorado. Desde el principio de la historia, vemos como el profesor de la clase insiste constantemente a Shoya que trate mejor a su nueva compañera, no deberías burlarte de su minusvalía sólo porque te resulte extraña, le dice.  Sin embargo, Shoya no llega a tomar conciencia del daño que hace hasta mucho después. Además, insiste en que los alumnos aprendan lenguaje de signos en sus horas libres, pero sin embargo, nadie (salvo la profesora de lenguaje de signos) sabe hablar este idioma. Pues bien, este mismo profesor es el que, posteriormente, se refiere a Shoko como aquella oveja negra o esa chica daba pena, y habla de los sordos como esa gente que utiliza sus desgracias para dar pena y aprovecharse de los demás. Absolutamente lamentable, y como decía, hipócrita. Además, cuando toda la clase de Shoya le da de lado, el profesor tampoco hace nada al respecto; pese a que haya hecho cosas mal, es un niño al que hay que enseñarle cómo comportarse, a llevarlo por el buen camino. Pero en vez de esto, cuando le pide ayuda, su profesor se limita a decirle te los has buscado, te lo advertí, y ahora tendrás que apañártelas tu solo. No me parece una actitud correcta.


Pero esta hipocresía también se extiende a sus compañeros de clase, a los alumnos. Bajo mi punto de vista, en el bulling no solo es culpable aquel que acosa activamente, sino también aquellos que, o bien no hacen nada para defender al acosado, o bien se ríen de las bromas del acosador o lo encubren. Pues bien, según esto, creo que aunque Shoya era el que llevaba a cabo el acoso como tal, toda la clase eran también acosadores. Pero las consecuencias para uno y los otros, fueron diferentes. De esto se queja más de una ocasión Shoya, ya que llega a decir en su momento ¿Pero por qué todos me señalais como el malo de la película?¡Todos os reíais de ella, incluso usted profesor!¡Las chicas eran las que peor la trataban!.  Y esta es la actitud que mantienen toda la historia: hacen a Shoya el único culpable cuando en realidad lo fueron todos.


Recomendable 4/5

Considero este manga recomendable principalmente por dos cuestiones: por la capacidad de perdón que demuestra la protagonista, y por tomar conciencia del dolor y consecuencias negativas que trae consigo el bulling. Es una historia que te enseña lo que sufre una persona acosada, y muestra algo para mí necesario: pese a esto, la capacidad de perdón que esta tiene. También enseña a que nunca hay que rendirse, pese a las adversidades que te presente la vida, y que para hacer el bien (para remendar nuestros errores) siempre habrá una segunda oportunidad si realmente nos esforzamos.  
Es un manga muy bonito, que pese a contar una historia dura, tiene momentos que también son felices y otros graciosos. 

Nota: Existe una adaptación al cine de este manga, como decía, que es bastante fiel a la historia aunque omite ciertos detalles. Si preferís ver la película y no leer los 8 tomos, también es una buena opción, aunque ya sabéis que yo generalmente recomiendo más los libros que las adaptaciones a la gran pantalla. 


Gata de Biblioteca.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Hola a todes! Muchas gracias por comentar. Valoro mucho vuestras opiniones y espero que hayáis disfrutado del post.

📣📣 En caso de que vengáis de la Iniciativa Seamos Seguidores, a vuestra derecha encontraréis un post específico, os agradecería que comentaseis ahí.

RESEÑAS POR CATEGORÍA